Húmeda amaneció la ciudad, llueve.
Brumas se elevan hacia lo alto desdibujando calles y edificios, dando en su camino consistencia física al espacio, pintando el aire de blanco.
Baño que satura los colores, perfiles vítreos, sombras en contraste, mientras las nubes a flor de asfalto, van tiñendo el mundo de plata.
Llora el amanecer hoy sus lágrimas de lluvia.