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2 de diciembre de 2008

Nuevo

Nada es igual a nada, ni un solo instante se parece a otro, todo transcurre, sucede deslizándose a veces en aparente calma para transformarse súbitamente y recomenzar de nuevo, o continuar incluso en esa permanente transformación. Nada es igual a nada; ni un momento, ni un amigo, ni un anhelo, ni un amor, ni un ideal, ni tan siquiera una palabra es igual a otra, incluso aquellas que se escriben igual son diferentes, aun pronunciándose similar difieren.

El universo Es en cada instante nuevo, recién estrenado a cada momento, inaugurado constantemente, reinventado, reescrito, recreado, nuevo, distinto y desigual. Eco de pluralidad, multitud unida a ti, que encuentra su expresión en cada mirada.

2 comentarios:

Angel dijo...

Entré a tu blog por el título: es un iman para alguien que le gustan las palabras y todo lo que se puede hacer con ellas; como lo que veo que tu haces. Un saludo.

bassho dijo...

Entorno virtual

Siempre hemos interpretado, teñido, modificado la realidad que nos rodea. Pero en la actualidad estamos creando entornos nuevos, abandonando la base física y tangible que nos sustentaba para habitar mundos que materialmente se apoyan en puntos de memoria cada vez más exiguos.

La música aplastada a los oídos que nos aísla, las imágenes en pantallas de 32 pulgadas para arriba que nos deslumbran, los canales y autopistas de información que nos desbordan...

Todo se disuelve.

Pero al final también esos entornos acaban cuajando, encarnándose en nuevos mundos físicos: ensordecedores, deslumbradamente cegadores, destructores de todo atisbo de respeto y reconocimiento de la presencia del otro (ente físico de carne y hueso al que nunca llegamos a comprender del todo).