Páginas

Buscar este blog

26 de febrero de 2007

Pelota

Rodaba, a veces cuesta abajo, pero también cuesta arriba, rodaba a derecha y también a izquierda, rodaba siempre y en todas direcciones, y esta capacidad de rodar le llevó a convertirse en un experto, podría afirmarse que era un tipo muy rodado, pero lo más llamativo es que este impulso de rodadura le llevo a adoptar poco a poco, de manera casi imperceptible primero, unas leves formas redondeadas, que rápidamente tendieron a la esfera de manera vertiginosa, diríase, que se trataba de un fantástico caso de adaptación al medio, mucho mas allá de lo que los mismísimos Darwin y Wallace podrían haber soñado.

Su metamorfosis se completó un día de finales de invierno, de esos en los que la luz parece anunciar un próximo renacer, y su esférica fisonomía recién estrenada, adquirió un brillo especial bajo esta mágica luz en tránsito.

La nueva forma trajo aparejadas nuevas capacidades, capacidades con las que tanto había soñado; la complexión esférica le aportaba una resistencia completamente inusual, así como, una encomiable facilidad para caer sin romperse y sobre todo, para desplazarse, moverse o precipitarse a merced de la pendiente más propicia en cada momento. Pero entre todos, quizás el más sobresaliente de sus estrenados superpoderes, era la ausencia de fisuras de su compacta forma, hecho que rápidamente fue admirado por todos y que no pasó inadvertido a sus superiores.

Su nuevo aspecto le confería una gran solidez estructural, parecía hecho del material mejor adaptado para los nuevos tiempos, pronto su valoración empezó a subir como la espuma y no tardó en ser aclamado como un líder. Pasó el tiempo, y aunque sus contornos perdieron un poco de su esférica perfección de otrora, mantuvo intacto el espíritu que le daba forma, y haciendo una vez mas de imperfección virtud, proclamó, con esa desfachatez propia del necio haciendo uso del poder, que su apariencia ovoide estaba ahora mucho más cerca del diseño mismo del planeta.

Su carrera fue imparable, fue votado y re-votado por una masa que lo aclamaba a cada paso, y así logró poner de moda, algo que hoy en día es aceptado como una verdad verdadera, la facilidad con que prospera el pelota, ese ser esférico-ovoide capaz de botar en cualquier dirección sin deformar su sólida apariencia, que vota hoy esto y mañana aquello sin perder nunca su centro, ese ser al que rebotan la honorabilidad, el buen hacer, el sentido de lo justo, la honestidad.


Un ser redondo, que amparado en la elasticidad de su forma, es símbolo de evolución, el mejor adaptado en esta nueva era, por eso su habitat más frecuente es la multinacional, los partidos políticos, las instituciones y administraciones públicas, los gobiernos corruptos...

1 comentario:

palabrerías dijo...

No se si te apatecería escribir directamente en este blog, no digo a nivel de comentarios, que esto ya lo haces desde tiempo atrás, sino directamente, se me antoja que puede ser una buena forma de dinamizar el blog por una parte, y por otra hay comentarios tuyos que bien merecen un post.
mi mail hiperdespacio@hotmail.com